el lunes que debió ser jueves

el jueves pasado todo salió al revés.


fui estúpidamente a saltar al charco. no salieron a la venta los boletos. me plantaron. mi lámina de tarea no me había gustado. me desilusionó el proyecto en michelin y me dí cuenta de que en la fábrica no hay bibbendumsitos haciendo las llantas.


hoy me encontré con dos palabras que reflejan mucho más de lo que dicen. salieron a la venta los boletos (y los pudimos comprar). volví a saludarte y me sonreiste de vuelta. hasta me agrada la lámina que entregué de tarea y amablemente dos damas dejaron sus números en mi parabrisas.


de no haber estado tan lleno el día de agradables momentos los números en el parabrisas me hubieran hecho el día. de igual manera tu sonrisa. pero sin esas dos palabras nada me hubiera hecho sentir bien.


me duelen los dedos, las piernas y sobre todo el tobillo que se resintió la semana pasada. pero ¿a quién le importa?


sólo quiero volver a verte pronto y volverte a ver sonreir. sí, tu también.