fuck the cook
no le vuelvo a hacer publicidad a ese imbécil.
consciente de que me equivocaba no pude esquivar el charco hacia el ya que había brincado. luego me regañaron por saltar en los charcos y no sabía cómo explicar que sé que la regué.
digo, ¿con qué cara le dices a alguien, con los pantalones mojados hasta las rodillas, que sabías que no debiste brincar en el charco?
sigo buscando la cara y las palabras.
y me enojé con el cocinero. fuck him.
1 Comments:
wey, neto... unas cheves no te caerían mal...
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