un super yo... super necio

un conflicto interno más que no tiene todavía conlusión.

en lo que va del año llevo más birdies que en todo el año pasado, he hecho más ejercicio, he caminado más y he viajado en pentapesero bastante más que el año pasado. hoy, allí, comenzó el conflicto interno, de regreso a la casa, con la ciudad a oscuras y el cham casi lleno.

después de ver mi vida flashear en tres ocasiones entre el Pata y el seguro, me dí cuenta que iba realmente cómodo. iba camino a casa sin preocuparme por no chocar, por no traer licencia, por estar cansado, por llamar a alguien... por nada.

el resto de la tripulación: estudiantes de secundaria y preparatoria, obreros, asistentes domésticos, el cadenero del bagua y yo. todos con la mirada perdida y el cansancio de viernes en la noche reflejado en la cara.

no entiendo por qué me siento orgulloso de poder subirme a un camión y sentirme bien allí dentro. pensaba entonces en la nena, segura en casa y yo camino a ella. a la casa llegué después de caminar un buen tramo, sólo encontré una recepción fría. roberta esta en casa de fátima. me di la oportunidad de no cargarla.

la monotonía nos puede matar, vale la pena darle una vuelta a la rutina. caminar sin haberlo planeado y conocer el lado de la vida al que normalmente le quitamos la vista. poder apreciar lo que tenemos sin perderlo, sólo apartándonos un poco.